Notar un cambio en los dientes de tu hijo puede ser inquietante. Si un diente de leche se pone gris tras un golpe, nos indica que el diente ha sufrido una lesión. Por suerte, con atención profesional y los cuidados adecuados, la mayoría de los casos se pueden solucionar.
Qué hacer si un diente de leche se pone gris por golpe
Actuar rápidamente puede marcar la diferencia en la salud dental de tu hijo, por ello es importante que tengas en cuenta la siguientes indicaciones:
- No manipules el diente y evita tocarlo o moverlo.
- Evalúa el golpe y observa si se produce sangrado, fracturas o dolor fuerte.
- Consulta a profesionales especializados en el trato con niños y adolescentes para valorar el daño causado y realizar el tratamiento adecuado.
- Sigue las indicaciones médicas y, en función del caso, se puede necesitar un tratamiento específico para cuidar el diente de leche y el futuro definitivo.
¿Cuáles pueden ser los tratamientos?
En el caso de un diente de leche gris sin dolor, con una observación hasta que se caiga el diente de forma natural, sería suficiente.
Por otro lado, si además del diente gris se produce dolor o infección, seguramente será necesario un tratamiento endodóntico para proteger el diente permanente, el cual pueden realizar nuestros expertos en traumatismos dentales en niños en Las Palmas.
Cómo prevenir futuros golpes
Para reducir la posibilidad de tener un diente de leche gris por golpe podemos adoptar las siguientes medidas:
- Utilizar protectores bucales cuando se realicen deportes.
- Supervisar mientras se divierten con juegos que impliquen saltos o caídas.
- Enseñar hábitos de prevención al correr o jugar.
Un diente de leche gris es una señal de que se ha producido un traumatismo, pero no es un problema irreversible. Consúltanos para poder realizar un diagnóstico preciso a tu hijo y dar con la solución, ¡llámanos!





